La Comisión Europea ha decidido poner fin a la investigación sobre las normas de libros electrónicos de Apple. Esta decisión se tomó después de que la queja, que había dado lugar a la investigación original, fuera retirada. La investigación, que se centraba en las presuntas prácticas competitivas desleales de Apple, culmina así sin acciones adicionales.
Antecedentes del caso
En 2015, la Comisión Europea había iniciado una investigación tras recibir quejas de que Apple estaría forzando a los editores a aceptar ciertas condiciones desventajosas para la venta de libros electrónicos. Estas condiciones presuntamente limitaban la competencia, favoreciendo la posición dominante de Apple en el mercado.
«La retirada de la queja indica que la situación en el mercado ya no justifica una investigación en profundidad,» explicó un representante de la Comisión.
Es importante destacar que el entorno tecnológico y las dinámicas de los mercados digitales han cambiado drásticamente en los últimos años, lo cual puede haber influido en la decisión de cerrar la investigación. Además, la retirada de la queja podría señalar que los editores afectados han alcanzado un acuerdo directo con Apple