Las estafas digitales a través de Zelle han aumentado en los últimos tiempos, generando preocupación entre los usuarios y las instituciones financieras. Zelle, la popular aplicación de transferencia de dinero, se encuentra bajo el escrutinio de reguladores y defensores de los consumidores debido al incremento en las quejas de usuarios que han caído en fraudes.
Preocupación por el aumento de estafas
En el último año, las instituciones bancarias han recibido un aumento significativo de reclamaciones relacionadas con estafas ejecutadas mediante Zelle. Estas estafas suelen involucrar a los usuarios enviando dinero a cuentas equivocadas bajo falsos pretextos, como ventas fraudulentas o solicitudes de ayuda urgente. A pesar de que Zelle es operado por un consorcio de grandes bancos estadounidenses, los usuarios están encontrando poca protección una vez que el dinero ha sido transferido.
El crecimiento en el número de estafas digitales ha provocado que algunos bancos comiencen a implementar medidas de seguridad adicionales para proteger a sus clientes. Sin embargo, la naturaleza inmediata y casi irreversibile de las transacciones de Zelle representa un desafío significativo.