A estas alturas, el desplome de los mercados mundiales del pasado lunes parece más bien un breve temblor, un pánico pasajero desatado por un evento inesperado. Agosto es un mes complicado para los mercados, ya que la liquidez es escasa y la volatilidad es mínima hasta que algo sucede. Argentina, con su economía frágil, enfrenta desafíos adicionales en un contexto global adverso y con una industria manufacturera en crisis.
Desempeño de los Mercados
El Nikkei japonés brilló el año pasado como uno de los mercados más rentables del mundo, con un alza del 28.2%. Hasta principios de julio, el veredicto sobre lo que pasó en «japanic» la semana pasada está cerrado. Sin embargo, el alcance y los riesgos que derivaron en el crash aún se están evaluando.
En una semana turbulenta en términos financieros, analistas preveían que Estados Unidos realizaría una fuerte baja de tasas en agosto, lo que podría haber sido una respuesta al «japanic». A medida que los traders se movían para cubrir apuestas agrias en el yen