El gobierno de Estados Unidos está evaluando la posibilidad de implementar otra ronda de tarifas sobre los paneles solares importados, una decisión que podría tener un impacto significativo en la industria solar tanto a nivel nacional como internacional. Aunque estas tarifas anteriores han sido motivo de controversia, el propósito principal es fomentar la producción local y proteger a los fabricantes estadounidenses. Sin embargo, los críticos argumentan que dichas tarifas incrementan los costos y ralentizan el desarrollo de tecnologías limpias.

Impacto de las tarifas en el mercado solar

Las tarifas sobre los paneles solares, que se impusieron inicialmente bajo la administración Trump en 2018, fueron parte de un esfuerzo para reducir la dependencia de las importaciones y potenciar la industria manufacturera nacional. Según datos del sector:

El 80% de los paneles solares en Estados Unidos son importados.
China y otros países de Asia son los principales exportadores de paneles solares a EE. UU.
Las tarifas anteriores llegaban hasta un 30% sobre ciertos productos.

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