En un análisis reciente, UBS sugiere que los rendimientos de los mercados emergentes pueden volverse negativos en 2025. Esta proyección surge a raíz de diversos factores económicos y políticos que afectan a estas economías, así como el impacto esperado de las políticas monetarias restrictivas en las principales economías desarrolladas.
Factores que contribuyen a la proyección negativa
El informe de UBS indica varias razones por las cuales los mercados emergentes podrían enfrentar dificultades en los próximos años. En primer lugar, se espera una desaceleración en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) global, lo cual puede reducir la demanda de exportaciones de las economías emergentes.
Además, la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos y otros bancos centrales está conduciendo hacia tasas de interés más altas. Esto generalmente resulta en flujos de capital que se retiran de los mercados más riesgosos hacia activos considerados más seguros. En palabras de un analista de UBS:
«La combinación de una mayor inflación global y políticas monetarias restrictivas presenta un ambiente desafiante para los mercados emergentes.»
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