Australia busca potenciar su transición hacia la energía verde aprovechando los cambios en las políticas climáticas de Estados Unidos. El gobierno australiano ha reconocido que necesita acelerar su adaptación a las energías renovables y ve en las nuevas políticas de Estados Unidos una oportunidad clave para fortalecer sus propias estrategias de descarbonización.
Colaboración Australia-Estados Unidos
El reciente giro de Estados Unidos hacia políticas más agresivas en materia climática, impulsado por el actual gobierno, ha sido percibido como un catalizador positivo para otros países que buscan cumplir con sus objetivos de reducción de emisiones. Australia, que tradicionalmente ha dependido en gran medida del carbón, está enfocándose en proyectos de energía solar, eólica y de hidrógeno verde.
Un portavoz del gobierno australiano señaló la importancia de este cambio global.
«La cooperación internacional es esencial para enfrentar el desafío climático, y estamos comprometidos a trabajar junto a Estados Unidos y otros socios para acelerar nuestra transición energética,» mencionó el portavoz.
La colaboración podría incluir la transferencia de tecnología, financiamiento conjunto de proyectos y acuerdos comerciales que faciliten el desarrollo de infraestructuras verdes.
